El metaverso es un concepto que ha captado la atención de grandes empresas tecnológicas como Facebook (ahora Meta), Google, Nvidia y Microsoft, entre otras. Este término no es nuevo; ya ha sido explorado en la literatura y el cine, con obras como Ready Player One o Los Sustitutos. De hecho, la transformación de Facebook en Meta refleja la apuesta de esta compañía por esta visión de futuro.
A continuación, explicaremos de manera sencilla qué es el metaverso, qué posibilidades puede ofrecer y cuánto tiempo podría pasar antes de que se convierta en una realidad tangible.
¿Qué es el metaverso?
El metaverso es un mundo virtual en el que las personas podrán sumergirse mediante dispositivos como gafas de realidad virtual y otros complementos tecnológicos avanzados. La experiencia será tan inmersiva que parecerá que realmente estamos dentro de ese mundo, interactuando con sus elementos como si fuera una extensión de nuestra realidad física.
Aunque los mundos virtuales no son una novedad, ya que existen desde hace años en los videojuegos, el metaverso busca ir mucho más allá. No se trata de un entorno de fantasía o una simple aventura digital, sino de un espacio alternativo donde podamos realizar actividades cotidianas como trabajar, estudiar, socializar e incluso realizar compras, sin salir de casa.
El término “metaverso” fue acuñado en 1992 en la novela Snow Crash. Desde entonces, se ha utilizado para describir entornos tridimensionales o virtuales donde las personas pueden interactuar como si estuvieran en un espacio físico. El objetivo es crear una especie de “realidad alternativa” que sea accesible para todos.
La visión de Meta y otras empresas
La idea principal detrás del metaverso es la creación de un universo paralelo completamente virtual. Este espacio será accesible mediante tecnologías de realidad virtual y realidad aumentada, permitiendo a los usuarios interactuar no solo con otras personas dentro del metaverso, sino también con el contenido y objetos digitales que forman parte de él.
El metaverso aspira a ser mucho más inmersivo que las experiencias de realidad virtual actuales. Por ejemplo, las gafas de realidad virtual no solo nos permitirán ver y escuchar, sino que se complementarán con sensores capaces de registrar nuestros movimientos físicos. Esto hará que el avatar de cada usuario imite con precisión sus gestos en tiempo real, logrando una experiencia más realista.
Otro avance significativo es la incorporación de tecnologías que puedan interpretar nuestras expresiones faciales. Esto permitirá que los avatares reflejen emociones como alegría, tristeza o sorpresa, añadiendo un nivel de interacción más humano. De este modo, el lenguaje corporal también formará parte esencial de las interacciones virtuales en el metaverso.
¿Qué oportunidades ofrece el metaverso?
El metaverso abre un abanico de posibilidades en diferentes ámbitos:
- Trabajo y negocios: Podremos asistir a reuniones virtuales, colaborar en proyectos en tiempo real e incluso diseñar entornos de trabajo personalizados.
- Educación: La enseñanza podría revolucionarse al ofrecer experiencias inmersivas, como visitas a lugares históricos o laboratorios virtuales, todo sin salir de casa.
- Entretenimiento y socialización: Desde conciertos y eventos deportivos hasta reuniones con amigos, el metaverso promete convertirse en un espacio donde el entretenimiento y la interacción social se fusionen.
- Comercio: Las empresas podrán establecer tiendas virtuales donde los usuarios podrán explorar productos como si estuvieran físicamente en una tienda.
¿Cuándo será realidad?
A pesar de los avances tecnológicos, el metaverso aún enfrenta numerosos desafíos antes de convertirse en una realidad cotidiana. La infraestructura necesaria para soportar este tipo de entornos, como redes de alta velocidad, dispositivos accesibles y contenido atractivo, aún está en desarrollo. Además, será crucial garantizar la seguridad y privacidad de los usuarios en este nuevo espacio.
Si bien algunas versiones iniciales del metaverso ya están en marcha, todavía pasarán varios años antes de que sea accesible y funcional para la mayoría de las personas. Mientras tanto, empresas como Meta y sus competidores seguirán invirtiendo en su desarrollo, prometiendo que este universo virtual revolucionará la manera en que vivimos, trabajamos y nos conectamos con los demás.